De todos los aficionados a las finanzas personales y a la bolsa son conocidas, en términos generales, las características que deben tener las acciones que Warren Buffett elige para componer su cartera de inversiones. Suelen poseer una gran ventaja competitiva frente a sus rivales, y son compradas a precios atractivos. Es por lo anterior, y de nuevo en términos generales, por lo que se conoce a Buffett como value investor.
Sin embargo, hay una cualidad común en los valores de su portafolio que no es tan difundida, y si te digo la verdad, me parece tan importante como las dos anteriores, y es la capacidad de sus acciones de incrementar el dividendo año a año. Warren Buffett ingresa en su cuenta una cantidad abrumadora de dividendos, cada año la cantidad ingresada es mayor por el incremento del dividendo, los reinvierte en su propia cartera de Berkshire Hathaway, y así construye una gigantesca bola de nieve creadora de riqueza.
Sabes desde hace mucho tiempo de mi devoción por el Vanguard Dividend Appreciation ETF (VIG), que gestiona de forma pasiva aquellas acciones del mercado americano que han incrementado el dividendo durante diez años o más de forma consecutiva. Dado que han superado momentos difíciles de recesión económica sin dejar de satisfacer a sus accionistas, estas empresas deben ser, casi por fuerza, de excelsa calidad. Y esa calidad se nota también en su rendimiento.
Como ves en el gráfico anterior, en los últimos diez años, el VIG ha tenido un rendimiento similar al SPY, superándole en algo más de un par de puntos, sin contar con los dividendos entregados que fueron y son superiores en el VIG. Pero observa como consigue capear las bajadas con menor volatilidad, debido al carácter defensivo de sus acciones en cartera.
Esto es lo que busca Buffett en sus acciones. Empresas de gran calidad, que lleven a cabo su estrategia de gran bola de nieve de riqueza, y que le aporten tranquilidad en los momentos en los que el mercado haga tambalear la paciencia de los inversores más calmados.
Veamos las primeras posiciones de la cartera de BRK:
Kraft Heinz, con una corta historia de mercado después de su fusión, entrega un dividendo del 3,21%, habiéndolo aumentado cada año.
Wells Fargo tuvo que reducir su entrega en la crisis financiera de 2008, pero desde entonces ha elevado su entrega cuatrimestral ¡de 5 centavos a 39!, ofreciendo un yield del 3%.
Apple pagó su primer dividendo en 2012 después de muchos años de política de no entregas. Desde entonces se ha convertido en una gran empresa para buscadores de rentas pasivas, curiosamente desde que Buffett apostó fuerte por ella. Desde entonces lo aumenta generosamente cada año.
Coca cola es la acción fetiche de Buffett. Con un PER actual de 46x y un PayOut insostenible, Warren la conserva y le entrega un 3,27% de yield en su enésima subida anual del dividendo. No sé si Coca cola superará este momento difícil en sus ratios, pero sigue aferrado a ella como el primer día. Es la típica acción del inversor en dividendos.
Son algunos ejemplos del gusto de Buffett por este tipo de acciones. Las acciones que entregan dividendos han tenido un rendimiento histórico superior que aquellas que no entregan o lo cortan. A su vez, las acciones que incrementan su dividendo año a año superan a aquellas que entregan dividendos de forma menos metódica, y que no los hacen crecer. Sin duda, una estrategia ganadora.